Durante el acto hicieron uso de la palabra representantes de instituciones que vienen acompañando hace décadas a las ferias correntinas. Ernesto Stahringer, director del Instituto de Cultura Popular (INCUPO), resaltó la importancia de hacer visible el trabajo de los feriantes, destacando que “como sociedad, necesitamos urgentemente que estos productores cuenten con todo el apoyo suficiente, para que puedan seguir trabajando en forma digna, ofreciendo alimentos sanos y a precios justos”. Por su parte, Federico Caniza, director del INTA Bella Vista, indicó que “el trabajo mancomunado de 25 años que vienen realizando productores junto a las diferentes instituciones”, señalando el permanente acompañamiento de la institución a las diferentes ferias del interior correntino. A su turno, Francisco Ingaramo, secretario de Desarrollo Económico de la Municipalidad de Corrientes, destacó que para actual gestión “las ferias no son sólo un puesto comercial, son una política pública que apunta a favorecer el desarrollo de las familias productoras locales, que beneficia a su vez a todos los consumidores, a todos los ciudadanos, por permitir el acceso a productos de calidad y a precios justos”. Antonia Báez, presidenta de la Asociación de Ferias, por su parte, agradeció el apoyo de las instituciones y de la población que “durante décadas vienen acompañando a la familia feriante”. Asimismo, sobresalió también la participación de ferias de otras provincias que año tras año se suman al Encuentro: “Este año ya confirmaron su presencia Ferias de Misiones, Chaco, Formosa, Santa fe y Buenos Aires”. En el cierre de su discurso, puso de relieve la concreción de un sueño largamente esperado: la pronta inauguración de la Sede propia, en el Barrio 17 de agosto de la capital, que ya cuenta con salón de ventas, espacios para capacitaciones y elaboración de alimentos. Finalmente, Vicente Picó, titular del Instituto de Desarrollo Rural de Corrientes (IDERCOR), ratificó en su mensaje “el compromiso del Gobierno Provincial de seguir apoyando las ferias francas”, planteando el desafío de avanzar en la “formalización de la producción artesanal de alimentos”, para favorecer la transformación de productos y su comercialización en nuevos mercados. “El desafío es que los productos cuenten con las condiciones sanitarias y fiscales necesarias para que puedan venderse no sólo en las ferias, sino también en supermercados a nivel provincial y regional”, finalizó.